Por Daniel Giacaman Zaror.
Bersuit Vergarabat, No Te Va Gustar (NTVG), La Vela Puerca,
Catupecu Machu, Angelo Pierattini y Tomo Como Rey encendieron el sábado el Teatro
Caupolicán en el marco del festival internacional La Llama.
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| Foto: Christian Iglesias / Arte Infernal / SanRock.cl. |
Fueron 10 horas de fiesta y hermandad latinoamericana, en un
encuentro donde los destacados exponentes de Argentina, Uruguay y Chile
pudieron compartir en el escenario y también tras bambalinas, mientras el
público gozaba de cada uno de los grupos que se presentaron.
Entre los asistentes también se encontraba el técnico de la
Selección Chilena de Fútbol, Jorge Sampaoli, reconocido fanático del rock y que
ya se ha transformado en un personaje asiduo a este tipo de eventos.
INICIO DEL SHOW
Todo comenzó pasadas las 17:00 horas con Angelo Pierattini,
quien de a poco logró ir encendiendo los motores de la velada, destacando una
notable versión de “Desapariciones”, tema de Rubén Blades popularizado por Los
Fabulosos Cadillacs y Maná, además de interpretar algunos de sus singles como “Que
simple vibra nuestro amor”.
Luego fue el turno de Catupecu Machu, conjunto trasandino que
desplegó toda su potencia sobre el escenario y consiguió el primer pogo de la
noche con “Eso Espero”, además de tocar clásicos como “Magia veneno”, “A veces
vuelvo” y “Confusión”.
En medio de la celebración de sus 20 años de trayectoria, la
banda argentina agradeció a sus seguidores y recordó con nostalgia la tocata
que brindaron en 2005 en La Batuta y que significó su debut en Chile.
"LLENOS DE MAGIA"
A las 20:30 empezó el show de La Vela Puerca. Los uruguayos
no esperaron ni un segundo y de entrada tocaron temas como “Clarobscuro” y “Llenos
de Magia”, lo que provocó que de inmediato aparecieran las banderas y los
bailes en el Teatro Caupolicán.
Como ya es habitual y con un gran protagonismo, Manuel
Ferreiro, técnico de escenario del grupo, subió a cantar “Burbujas” y “Sigo
Creyendo”, mientras que Denis Ramos, de NTVG, mostró sus dotes en “Documentos”.
Sin duda, la presentación de La Vela Puerca, que se extendió
por una hora y media, fue uno de los momentos más altos de la jornada.
MELANCOLÍA, IMPROVISACIÓN Y SKA
Tras el descanso, llegó la cumbia de Tomo Como Rey, que durante
30 minutos hizo bailar a los presentes con canciones como “Borrachos al poder”,
“Arriba de la Pelota”, “Los que toman como rey” y “El Carrete”, tema que contó
con la participación del vocalista de Sinergia, Don Rorro.
NTVG, que también festejaba 20 años, saltó
a escena a las 23:30 y nuevamente el Teatro Caupolicán se llenó de banderas. Como
caracteriza al grupo charrúa, el repertorio incluyó temas pausados y
melancólicos mezclados con otros de gran ritmo y que tienen como base el ska.
Los uruguayos invitaron a Cóndor Sbarbati y Daniel Suárez de
Bersuit Vergarabat para cantar “No sé si escuchas”, mientras que Fernando Ruiz
Diaz de Catupecu Machu subió para interpretar “Poco”, un tema que no estaba en
la lista original y que sólo fue incluido luego de que surgiera la idea en las
conversaciones de camarines.
Sobre el final de su show, NTVG se fue como en un tubo y lanzó
lo más conocido de su repertorio, incluyendo canciones como “Tan Lejos”, “A las
nueve”, “No hay dolor”, “Nada para ver”, “Cero a la izquierda” y “No era cierto”.
FIESTA BERSUITERA
El cierre de La Llama estuvo a cargo de Bersuit Vergarabat,
banda que subió al escenario cuando ya eran pasadas las 1:30 de la madrugada. Pese
a ello, el ánimo se mantuvo en lo más alto y se generó una gran interacción con
el público, ya que Dani Suárez dialogaba constantemente con sus seguidores.
Los argentinos le devolvieron la mano a NTVG e invitaron a Emiliano
Brancciari en el tema “Sencillamente”, mientras que los vientos de la banda
uruguaya estuvieron presentes en “Sr. Cobranza”.
Asimismo, Alberto “Tito” Verenzuela asumió el protagonismo
para cantar “Porteño de Ley” y luego en un solo de guitarra al que se le unió Oscar
Righi mientras el resto de la banda salía del escenario para dejar a ambos
músicos en primera plana.
Poco más de una hora y media duró la fiesta bersuitera que
terminó bien arriba tras finalizar su presentación con dos clásicos como “Yo
Tomo” y “La Bolsa”, poniendo de esta forma el broche de oro a la primera
edición de La Llama cuando el reloj marcaba las 3:10 de la madrugada.
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